El pasado día 29 de enero nos reunimos para celebrar la inauguración de la nueva sede de nuestro colegio. Algunas personas avisaron de que no iban a poder acudir y otras fueron llegando poco a poco a la nueva sede. Oskia preparó con cariño toda la sala e hicimos un círculo donde poder encontrarnos.
Encuentros, abrazos, alegría… Se compartió cómo se había realizado el cambio de oficina y los proyectos que se tienen para ponerla un poco más acogedora y práctica. Joseba hizo un breve resumen de lo que ha sido la historia del APESNA-NAGIHEO/COEESNA hasta llegar al día de hoy y explicó el Plan de Formación (jornadas, cursos, sesiones…)
Pasamos a realizar un acto simbólico de inauguración que consistió en pensar un deseo, un sueño para el NAGIHEO/COEESNA y la Educación Social, y también un motivo por el que dar las gracias. Los escribimos en dos papelitos que llevaban impreso nuestro logo, deseo y agradecimiento en cada uno. Uno lo echamos en una caja para posteriormente quemarlos y el otro lo metimos en un globo que hinchamos después.
Una vez quemados los papeles de la caja pusimos las cenizas en un tiesto donde la colegiada más antigua presente y un estudiante en prácticas trasplantaron un “dracaena marginata” para que sea su abono.
Nuestros sueños y deseos, junto con el agradecimiento, abonan, nutren el NAGIHEO/COEESNA y posibilitan que crezca y enraíce día a día en los diversos ámbitos y realidades sociales donde estamos presentes.
¿Y los globos?… ¡Jugamos un rato con ellos! Un poco de diversión, que no toquen los globos el suelo, ¡a saltar!, ¡a empujar!… hasta que finalmente cada cual se quedó con uno que tuvo que pinchar para ver el papelito que le había tocado. Así que además, cada quien se llevó un deseo y un agradecimiento a su casa.
Y terminamos como se termina y celebran las cosas en nuestra tierra… ¡comiendo! El catering del Paris365 nos preparó unos pintxos con los que seguimos disfrutando un rato más y fuimos charlando con unx y otrx.
Ahora nos queda seguir regando y cuidando la planta que simboliza el NAGIHEO/COEESNA, porque al verla, será imposible no recordar ese acto en el que volvimos a poner nombre a nuestros sueños y trajimos a nuestro presente tantos motivos por el que estar agradecidxs.
Gracias a todas las personas que en la sede y en la distancia compartieron ese rato e hicieron que las ilusiones se multiplicaran.
